La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Agricultura) elevó la alerta sanitaria contra el gusano barrenador del ganado, esto luego de que se reportara su presencia en el sur de Nicaragua, suponiendo esto una distancia de aproximadamente 700 kilómetros entre nuestro país y Centroamérica.
Ya en agosto del año pasado, el organismo había reforzado las medidas preventivas en puertos aéreos, marítimos y fronteras ante las notificaciones de casos en Panamá y Costa Rica, las cuales han incrementado desde entonces.
A raíz de esta situación, durante 2023 se envió materiales de difusión a los 32 estados federales, con la finalidad de concientizar sobre esta amenaza de la que México se ha mantenido libre desde hace más de tres décadas.
La estrategia abarcó farmacias veterinarias, rastros, uniones ganaderas, centros de acopio de animales, mercados de animales, asociaciones ganaderas locales, empresas forrajeras y dependencias locales del sector.
Agricultura informó que a lo largo de este año, la Dirección de la Comisión México-Estados Unidos para la Prevención de la Fiebre Aftosa y otras Enfermedades Exóticas de los Animales (CPA) recibió 15 reportes por sospecha, sin embargo, todos fueron negativos.
Tabasco y Chiapas son los estados mexicanos considerados como de alto riesgo, debido al flujo de migrantes y el ingreso de mercancías agroalimentarias, motivo por el que técnicos de la Dirección General de Salud Animal (DGSA) se han enfocado en promover la aplicación de medidas preventivas y la notificación en la región.